Viendo el post anterior, reconozco que hay un par de libros que, por una razón u otra, no acabé de leer. El caso es que pillé una racha de libros muy gordos y, en algunos casos "densos". A veces tenía que pausar la lectura por compromisos de reseñas y críticas con otros libros, y luego igual no enganchaba de nuevo el que había dejado. Pero eso me pasó un par de veces solamente, y en cuanto pueda los reanudaré.
Pero, por otro lado, si releéis la lista, verés la clase de libros que en algunos momentos estaba leyendo: El Consejo de Hierro, Todos sobre Zanzíbar, Canción de Hielo y Fuego (I y II), Erewhon, etc. Voluminosos, y con sustancia (El Consejo de Hierro y Todos sobre Zanzíbar...).
Pero, por otro lado, si releéis la lista, verés la clase de libros que en algunos momentos estaba leyendo: El Consejo de Hierro, Todos sobre Zanzíbar, Canción de Hielo y Fuego (I y II), Erewhon, etc. Voluminosos, y con sustancia (El Consejo de Hierro y Todos sobre Zanzíbar...).
También había novelas cortas y libros más ligeros, por supuesto.
Sin embargo, este año había cogido la marcha de libros en teoría más pequeños, incluso los que me mandaban para reseñar los elegía menos voluminosos. Pero resulta que me envían La Ciudad de las Llamas (Niven/Pournelle), muy voluminoso, y además me he puesto a leer DUNE desde el principio, por orden cronológico. Edición bolsillo algunos, pero tochos de todas maneras. Y como comenté en otro momento, aún tengo otros tochos, y series de libros gordos preparadas para leer.
Así que este año que me lo quería tomar con tranquilidad en cuanto a la lectura, se está complicando a mitad año.
En fin, que todos los problemas fueran así.
En fin, que todos los problemas fueran así.
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